Parque Nacional de Garajonay e isla de La Gomera

69 ASÍ SE fORMó lA GOMERA L a erosión constante y progresiva desde hace, al menos, dos millo- nes de años, ha desmantelado gran parte de la supraestructura de las lavas del segundo ciclo. Esto ha dejado resaltando en el terreno las chimeneas o salideros de las lavas sálicas o conductos subvolcánicos que, por su mayor resistencia, resaltan topográficamente de manera diferencial sobre el terreno, dando lugar a alguno de los típicos roques de La Gomera. Afloran actualmente en forma de masas, a veces monolíticas (agujas), de gran altura y paredes verticales escarpadas, dominantes sobre el entorno. Muchos de ellos se encuentran dentro del Parque Nacional, lo que indica, como ya se suponía, que la gran abundancia de lavas pliocenas (basaltos horizontales) procede de la parte central de la isla. Los roques más significativos son: • Roque de Agando. • Roque de Carmona Roque de la Zarcita. • Roque de Ojila. • Roque las Lajas. • El Calvario de Alajeró: domo traquítico, de crecimiento inicial- mente endógeno, hasta que evolucionó a domo exógeno. • Roques de Targa: conjunto de varios cuerpos traquíticos intrusi- vos, con morfologías domáticas. • Fortaleza de Chipude: domo-colada, que intruye en la serie miocena y pliocena, derramándose sobre la superficie de esta última en forma de una gruesa colada traquítica. • Alto de Cherelepín: de morfología poco definida. • Montaña de la Zarza: de morfología alargada, de tipo cúmulo- domo y composición traquítica. • Roque Blanco de El Cabrito: intruye en las dos series basálticas y es visible su conducto de alimentación. • Roque Cano: intruye en el Complejo Basal y Complejo Traquí- tico-Fonolítico. Se sitúa en Vallehermoso y es el símbolo de la población. Su edad es de (4,4 Ma). • Roque de Seima, Roque Teremoche. • Los Órganos, que intruye sobre los materiales del CB en la costa norte de Vallehermoso. Los roques. El símbolo de La Gomera