Guía Geológica Parque Nacional de las Tablas de Daimiel

30 EL CICLO DE LAS ROCAS La corteza terrestre está en permanente evolu- ción, sufriendo continuas variaciones. Se trata de un ciclo geológico que se manifiesta a través de la generación de tres tipos de rocas: ígneas (plutónicas y volcánicas), metamórficas y sedi- mentarias . Todas ellas formadas a condiciones de presión y temperatura diferentes. Las rocas plutónicas o cristalinas formadas en el interior de la Tierra a temperaturas y presio- nes altas, implican una fusión previa, es decir derivan directamente del magma, en concreto, fundidos de sílice, aluminio, magnesio, etc. Un caso especial es el de las rocas volcánicas pues, procedentes directamente del magma, se forman en el exterior. Las rocas metamórficas , formadas, también en el interior terrestre, a presiones y temperaturas generalmente altas, no vienen de una roca fundida sino de cualquier otra roca. Las rocas sedimentarias se originan a tempe- raturas y presiones bajas, muy próximas a las atmosféricas. En la génesis de todas las rocas, presión y la temperatura juegan un papel fundamental, por lo que fácilmente se puede entender que de una roca ígnea se puede formar otra metamórfica y estas dos, por erosión, dar lugar a una sedimentaria. Existe una relación natural entre ellas mani- festada por un camino circular continuo que se denomina el ciclo geológico, petrológico o de las rocas. El magma se forma por las altas presiones y temperaturas del interior de la Tierra. El ascenso de tales magmas hacia la superficie se produce porque son menos densos que las rocas de su entorno. Al subir y encontrar otras condiciones de presión y temperatura, se enfrían, formando rocas que con el tiempo (millones de años), por erosión, quedarán expuestas en la superficie a las condiciones atmosféricas. Allí, también ellas se erosionarán. Los productos de esta erosión serán arrastrados por los ríos, glaciares, viento, etc., a las cuencas más deprimidas donde formarán sedimentos, y después, rocas sedimentarias. Hasta ahí, la mitad del ciclo, porque con el paso del tiempo geológico (muchos más millones de años) las rocas sedimentarias pueden volver a las profundidades terrestres empujadas por una orogenia. Las fuerzas tectónicas en profundidad aumentarán presión y temperatura, por lo que se transformarán en rocas metamórficas. Inclu- so, si presión y temperatura siguen subiendo, estas rocas pueden llegar a fundirse y generar un magma. De esta forma se cerraría la otra mitad del ciclo. El ciclo geológico o de las rocas.